Última cita |
Ya por el aire navega tu memoria y todo viene a mí como fue entonces. ¡Oh! sueño, ensueño, tiempo y tiempo para siempre y siempre detenido. Monstruosamente múltiple se alza se alzaba el mar sobre los malecones mordiendo los costados de la tierra. Y tú tuviste miedo, frío, amor tuviste. Y amor hubo, miedo, amor, en nuestros corazones. Cuando entonces por eso se puebla el mar a tu conjuro y un aire conocido dispone sus fantasmas, y yo estoy solo, y la furia del mar puebla la tierra, seres de niebla, blancos, se sientan a mi lado y conmigo conversan como hermanos. Luego vienes tú, flotando como harina Y silenciosa y blanca, fina y fría vas diciendo tu nombre, hermana mía, y en el aire derramas tu aire triste. Mas, ya no basta tu nombre y su dulzura cuando ahora, el recuerdo de todo me golpea. Tú del mar venida, hecha de bruma acaso, o de los sueños acaso rescatada, vete y déjame solo. Deja morir lo que ha muerto. Lo que hemos dejado morir, muerto de frío del otro lado de los sueños, sueña. Del otro lado está, y para siempre, en un atardecer de mar y olvido. |
miércoles, 19 de septiembre de 2018
domingo, 31 de agosto de 2014
Paisaje y ruego
el arador y los bueyes.
Cielo y tierra: el horizonte
y el arador en el vértice.
¿Aras labrador en tierra
o abres surcos en el cielo?
Ara labrador en tierra.
Con reja de luna y bronce.
Ara labrador en tierra.
¡No olvides a tus hermanos!
viernes, 15 de junio de 2012
A Pedro Piccatto
martes, 22 de noviembre de 2011
Destino
lunes, 23 de agosto de 2010
Juventud
viernes, 21 de mayo de 2010
Para no pensar lo que debes pensar
Para no pensar lo que debes pensar,
para no decirte lo que debes decirte,
ibas mirando algo que no existe.
Pero debes pensar y oír como se debe.
Mira los árboles.
Tienen hojas verdes ahora
y tú no las has mirado.
Palpaste más de una vez sus troncos
viste latir y subir su savia.
Mira sus hojas ahora.
Qué manía tienes.
Quieres estar en el fondo de las cosas
quieres ver las hojas cuando no existen
todavía.
Te quedarás ciego así, confundido;
olvidarás el verde
la forma de toda cosa, morirás.
Olvidarás todo así, todo.
Mira las hojas.
Tienen forma de hojas
y son verdes.
martes, 16 de marzo de 2010
Ultima cita
Ya por el aire navega tu memoria
y todo viene a mí como fue entonces.
Oh! sueño, ensueño, tiempo y tiempo
para siempre y siempre detenido.
Monstruosamente múltiple
se alza
se alzaba el mar sobre los malecones
mordiendo los costados de la tierra.
Y tú tuviste miedo, frío, amor tuviste.
Y amor hubo, miedo, amor, en nuestros corazones.
Cuando entonces por eso
se puebla el mar a tu conjuro
y un aire conocido dispone sus fantasmas,
y yo estoy solo, y la furia del mar puebla la tierra,
seres de niebla, blancos, se sientan a mi lado
y conmigo conversan como hermanos.
Luego vienes tú, flotando como harina.
Y silenciosa y blanca, fina y fría
vas diciendo tu nombre, hermana mía,
y en el aire derramas tu aire triste.
Mas, ya no basta tu nombre y su dulzura
cuando ahora, el recuerdo de todo me golpea.
Tú del mar venida, hecha de bruma acaso,
o de los sueños acaso rescatada,
vete y déjame solo.
Deja morir lo que ha muerto.
Lo que hemos dejado morir,
muerto de frío
del otro lado de los sueños, sueña.
Del otro lado está, y para siempre,
en un aterdecer de mar y olvido.
viernes, 1 de enero de 2010
martes, 29 de diciembre de 2009
Recuerdo
Aquellos árboles
hacia el poniente
en fila navegando,
y una voz de mujer,
una voz que me llama,
están llamando.
Un cerco de cinacinas,
una paloma muerta en el camino
y una risa que ríe,
están llorando.
Oh paisaje viajero,
hacia el poniente huyendo,
me navegas la sangre
que te he dado.
martes, 10 de noviembre de 2009
Un motivo de nuestra infancia
¡Muchachos...!
A la quinta Recaeta,
cada cual con su cometa.
Ay, que la mía no sube.
Ay, que sube
Sube, sube, mi cometa
y no el viento
sino mi corazón
le presta el movimiento.
¡Muchachos...!
Ya no hay quinta Recaeta.
Y sin embargo... Cada uno
de nosotros, tenemos una cometa.
Más allá de los rascacielos
por arriba de los palacios
está el viento.
¡Amigos! ¡El viento...!
Yo tengo veinte cometas.
Subid vosotros las vuestras.
¡Arriba! ¡Al viento!
Tenso el hilo
y un nudo de amor en el corazón,
para pulsar el viento.
¡Amigos! ¡El viento...!
martes, 27 de octubre de 2009
ORACIÓN DE LA DESESPERANZA
y yo aquí.
Ni velamen ni vientos,
ovillado en la noche
interrogante signo sin frase
Y este dolor
sin raigambre en las cosas
—fantasma sin memoria—
¿vino de un mundo donde no hay ojos,
que velen a la muerte?
Quiero solamente,
en bautismos de alegría y de dolor,
apretarme a la Tierra
bajo el ala quebrada del desvelo.
domingo, 19 de julio de 2009
Alone
One day I had the sea
upon my heart.
Like a cold tongue,
on my heart
the sea.
And I was far from you, my mother.
And you were far from me,
sailing on a bannerless wind.
There were no roots waiting
under the earth,
no trees above the earth.
And the sea licked at my heart
like a cold tongue.
Ah, only my eyes.
In their icy sockets,
nowhere to look at
and spinning.
Traducción de Laura Chalar, publicada en la revista británica Magma, No. 44 (www.magmapoetry.com).
viernes, 26 de junio de 2009
El abismo
Estoy debajo de mis sueños.
Ya ni estrellas ni pájaros nocturnos
levantarán mi canto.
Puente de plata y oro es el amor.
Amada, tú eras el único asidero
pero yo he mirado al abismo
donde ondula (libre de nosotros)
el limo de mis sueños y tus sueños.
Desde entonces ah!
qué solo estoy en la tierra.
Y tú, qué sola.
No lo sabes y disuelves tus lágrimas en risas.
Desde entonces,
cuando apoyo mi frente
en el tibio regazo de tu seno,
algo quiero olvidar que no conozco todavía.
Y crece mi ternura para ahuyentar el miedo.
Lejana erra mi alma
y en sus flancos llueve la tristeza.
Deja que te llore y que me llore allá...
miércoles, 27 de mayo de 2009
Proclama
albas madrugadas del mundo
soñó mi corazón, ¡pobre andarín nocturno!
Muchachas de los puertos,
marineros borrachos, desde aquí
cáliz fué mi pecho de vuestro vino amargo.
Hermanos tristes,
yo he visto la Luna hacernos muecas
mientras la última estrella de la noche
azul y lejana se perdía...
Noche negra.
Como un recio patriarca, impenetrable, austera
vela la noche o Dios nuestro desvelo.
Y en vosotros la secreta lumbre
y la montaña empinada hacia el cielo
y el río que la ciñe, limpio abrazo.
Y más allá de la noche las estrellas.
Y vuestra lumbre oculta
y la nuestra encendida en los días,
¡hacia la montaña, más allá de la noche
a rescatar la estrella perdida!
martes, 28 de abril de 2009
SI MURIERA ESTA NOCHE
Si muriera esta noche
si me muriera
si este coito feroz
interminable
peleado y sin clemencia
abrazo sin piedad
beso sin tregua
alcanzara su colmo y se aflojara
si ahora mismo
si ahora
entornando los ojos me muriera
sintiera que ya está
que ya el afán cesó
y la luz ya no fuera un haz de espadas
y el aire ya no fuera un haz de espadas
y el dolor de los otros y el amor y vivir
y todo ya no fuera un haz de espadas
y acabara conmigo
para mí
para siempre
y que ya no doliera
y que ya no doliera.
martes, 14 de abril de 2009
En agosto de 1942
A Mario Arregui
sábado, 14 de marzo de 2009
SABELO
lunes, 2 de marzo de 2009
lunes, 2 de febrero de 2009
POEMA EN LA TARDE
martes, 27 de enero de 2009
Lo que fue
que mi memoria sabe,
y me detengo entonces
indagándote el rostro.
Mas ah!, ya no es posible
siquiera, no es posible
detenerte un instante.
Todo está muerto, y muerto
el tiempo en que ha vivido.
Yo mismo temo, a veces,
que nada haya existido;
que mi memoria mienta,
que cada vez y siempre
–puesto que yo he cambiado–
cambie, lo que he perdido.
sábado, 20 de diciembre de 2008
Solo
sobre mi corazón.
Como una lengua fría,
el mar
sobre mi corazón.
Y estaba lejos de ti, madre mía.
Y tú lejos de mí,
navegando en un viento sin banderas.
No había raíces que esperan
debajo de la tierra.
Ni árboles había sobre la tierra.
Y el mar lamía mi corazón,
como una lengua fría.
¡Ah! Sólo mis ojos.
En órbitas de hielo
y sin tener dónde mirar,
girando.
Final
martes, 9 de diciembre de 2008
En un baldío,
sábado, 8 de noviembre de 2008
Volver
Y ya en el día
lunes, 25 de agosto de 2008
Esta calle vieja
sábado, 16 de agosto de 2008
lunes, 3 de marzo de 2008
Lo inasible
viernes, 2 de noviembre de 2007
Oh! desasido, hijo del aire
flotando entre las cosas.
Tú que amas los flancos de esta ciudad,
las calles y suburbios de esta ciudad.
Tú que amas los terrenos baldíos
donde meditan su destino las ollas viejas
las sartenes sin mango
y las escupideras sin fondo.
Tú que aprecias la utilidad de tanta cosa inútil,
eres un descastado
en esta casta de buitres y ladrones.
martes, 25 de septiembre de 2007
Canción por la España obrera
Versión de Eduardo Darnauchans
Cruzados del alba nueva
son los obreros de España.
Cantando cruzan la Noche.
Noche oscura y luna negra
(sotana y borrón de frailes).
-
Cantando cruzan la Historia.
Grito y gemido en el canto.
Que nunca parió una madre
sin el bautismo del llanto.
-
Cruzados del alba nueva
son los obreros de España.
Cantando cruzan la Noche
Noche oscura y luna negra
(sotana y borrón de frailes).
-
En la Noche negra Noche:
los fusiles proletarios.
Cada fulsil un candil
que empuja la Noche afuera.
-
Oh! fusil de proletario.
Dos brazos de luz te escoltan.
Y una luz alta en la frente
señala caminos claros.
Octubre 1936
jueves, 30 de agosto de 2007
Noche
Video homenaje a Líber Falco
http://www.youtube.com/watch?v=VgxqPzA_tM8
martes, 28 de agosto de 2007
Luna
Tan perfecta y blanca.
Tan alta!
Tan lejana y blanca.
Lejos de la muerte,
y de la vida lejos.
Lejos de los llantos.
De las risas, lejos.
Tanto!
No sabe esta luna
cómo todo es triste.
Cómo es bello el mundo
y la misma muerte acaso,
acaso, es volver sin irse.
Sola arriba, sola.
Tan perfecta y blanca.
Tan alta!Tan tejos de todo!
Nada arriba, nada.
Ella sola y nada.
jueves, 14 de junio de 2007
V
Para vivir
viernes, 23 de marzo de 2007
Falco y la ciudad: palabra en movimiento
Adriana Topalian
martes, 13 de marzo de 2007
SOLEDAD
III
"ALBA"
lunes, 12 de marzo de 2007
La Moneda
en un aire y tiempo de otro tiempo,
ríen.
Cómo en su inocencia,
la Tierra es inocente
y es inocente el hombre.
Míralos cómo al descubrir la muerte
mueren, y ya definitivamente
ya sus ojos y sus dientes
comienzan a crecer junto a las horas.
Deja que ellos guarden sin saberlo,
el secreto último de su inocencia
nuestro último sueño, ya olvidado.
Cuando todo termine,
deja que un niño lleve
nuestra única y última moneda.